¿Que tan fría es una helada cuando usas pijamas de franela?
Entre frío y silencio no sé que pensar.
El silencio da gritos de horror ante la presencia de una calma emocional.
Fue tanto el coraje que mi cabello se alació por si solo, la revolución en la que combatí había terminado con un saldo razonable...no hubo muertos.
No hay nada más que esperar el 21 de cada mes...parte de la historia del siglo xx, la historia personal en cada detalle de lo que hacemos y que por motivos ajenos llega a su fin.
Aparece el nuevo amanecer y lo veo completamente sola, sin el antiguo o un nuevo compañero, puedo volar a donde se me antoje y tengo vacía la definición de cárcel amorosa.
mi libertad es completa, el cadáver dió su último aliento y no se que hacer con mis manos...tal vez un papalote de colores brillantes y extraños que reflejen el lado incursi de mí.
No hay tiempo de nada, me aguardan mil preguntas con respuestas escondidas en el futuro.
La prioridad mayor ahora es sonreir y no volver a preocuparme por la cuestión implícita en el texto.
Olvidé mencionar que tambien debo cumplir con el lema de vivir cada día sin arrepentirme.

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