Compartimos mucho más que sueños y recuerdos.

Somos tantas cosas que es imposible olvidarnos uno de otro en cualquier situación.

Hemos dicho todo lo que se perdía en el mar de silencios y después de todo hemos luchado hasta el final para no perdernos.

Pláticas al amanecer, simples confesiones de lo que debe ser, lo que desde un principio debimos de haber hablado para evitar que el extrañarnos fragmentara todo lo que somos,evitar que el cielo cayera con todo y tormentas y frentes fríos, sobre tí, sobre mí.

Fue inútil, esto es tan fuerte que en plena libertad queremos volver y nadie lo entendería porque es demasiado simple : no debimos de separarnos.

Vamos una vez más...ven...quédate...no te vuelvas a ir...