Ha comenzado mi navidad con el mayor deseo de todos : respirar en tu corazón.
Tiempo al tiempo, sólo eso. Nos hemos visto igual que ayer...sostén mis manos y quédate siempre a mi lado.
Mi fé se rehusó a olvidarte, ha salido parte de la luna dando esperanza en esta noche que es tan real como un beso.
Pequeñas ilusiones trazan un sendero, todo es tan lento que es lo que debe ser, una redención para un corazón que se creía perdido.
Aguardo en el frío, una respuesta no definitiva, se necesita más que reconocer tu equivocación, pero un inicio siempre es por donde hay que comenzar y allí te he escuchado, nada ha desaparecido.
Conservo el calor de tus manos en las mías, el contacto de miradas que se anhelaban y el sabor de tus labios en los míos.
El pasado duele menos, hoy estás regresando con la estrella que todo lo guía, con el ángel que siempre te espera...