Charlas infinitas mostraban el paso de una revolucion en lo que Brenda fue.
Se habia hartado de vivir siempre en la misma esfera, de la misma manera sumisa que cuando era pekenia. Se rehusaba a ser la ninia piadosa de siempre, reclamaba a su ser vivir en el tormento eterno de dejar que su exterior la utilizara como munieca de trapo.
Y ahora? Se quedaba sola sin reir al maximo explotando su caracter con los minimos intentos, vestia un solo color y su mente desbarataba todo lo simple porque para ella carecia de importancia.
Por las manianas respiraba la brisa que quedaba despues de llover, manejaba sin hablar con su padre, todos los dias se despedia de la misma manera y en su casa ponia el cafe a las 5:55 am. Cada domingo hacia una cazuela de avena que se terminaba en tres dias. En esa mezcla lanzaba todas sus frustraciones y batia y batia hasta incorporar todo para poder irse a dormir tranquila e inicar la nueva semana.
Se preocupaba pro los nuevos cambios en su persona...lo que mas la hacia pensar era desconocer cuando culminarian y que seria de ella al final del proceso de transformacion...
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