Cama

Cada vez que tiendo la cama me acuerdo de ti.
Muchas veces he pensado en lo bien que me haría
secuestrarte alguna noche y que la pasaras conmigo.

Tengo ganas de que me hagas el amor,
suena tan simple.

Y es que no es solo hacerlo y ya,
me gusta que no te calles
que de repente nos de risa lo que pasa en el mundo.

Me parece increíble que no te lo diga,
¿serías capaz de decir que no?
He visto tantos cuentos
que confundirme se da solo.

A estas alturas solo quiero estar contigo,
porque no necesito algo más ahora.
Y en tí confío todo,
porque nada es algo que no pueda decir,
no lo puedo explicar bien
y las canciones suenan y me acuerdo de esas veces.

La emoción, desde la propuesta indecorosa
y el default, tu medida va con la mía,
es una buena mancuerna.

Que siempre me he visto maldita,
que digo cosas en el peor momento
que todo lo hago un drama.
No me gusta complicarme contigo,
porque pareciera que es el único lugar donde puedo respirar
que no hay otra distracción más que tu boca o tus manos, tú por entero.

Y tú no te preocupas pero cuidas los detalles,
sobre todo me cuidas a mí, y quizá eso lo admiro,
porque eso es lo que importa.

Fuera de esto no necesito más,
las flores están de sobra
cuando cumples deseos.

Comentarios

Adrian Andrade dijo…
interesante